viernes, 14 de agosto de 2015

Sidreria EL FURACU, VILLAVICIOSA


 
Alrededor de 150 vuelos al año, 70 noches de hotel y aproximadamente unas 250 comidas fuera de casa….
Y si tengo que escoger un sitio, una mesa, tiene nombre y apellidos, SIDRERIA EL FURACU en Villaviciosa….
 
Casi que me da vergüenza escribir sobre esta, mi segunda casa, porque con este irán 72 post escritos en este blog, y ninguno de ellos sobre el restaurante donde más como, y donde más disfruto en este mundo….
 
Por qué? Quizás por lo de siempre. Waikiki y Seychelles suenan muy exóticos y luego lo de casa lo dejamos para el final.
Sinceramente no se si son 20 o 40 comidas al año, no las cuento y la razón principal es que es como comer en casa. La comida de los restaurantes cansa, la grasa, los platos, los menús, cuando se come fuera de casa todo acaba cansando, y en El Furacu, eso no pasa. Como se consigue eso? Cocinando rico, casero y sano.
 

Lo primero deciros que esta Sidrería se encuentra en un bonito pueblo de Asturias que se llama Villaviciosa, por lo que si queremos buscar una buena excusa para ir a comer a El Furacu, en Villaviciosa y alrededores hay muchas cosas que ver y/o hacer: el mismo casco antiguo de Villaviciosa donde se puede dar un bonito paseo, los pueblos pesqueros de Tazones y Lastres, el Museo de Jurásico entre Colunga y Tazones, la playa de Rodiles y un largo etc.
 
 
Lo primero en lo que uno se fija cuando entra en El Furacu, es que se trata de una Sidrería normal, yo me siento como en casa, pero se trata de una sidrería de las de siempre.
Lo primero que los “expertos” en sidra buscan es buena sidra, y en Asturias POCOS, MUY POCOS la controlan como Naredo, “Nare” para los amigos y clientes. Sidra buena, muy buena, bien escanciada, a tiempo, a temperatura…
 
 
Algo que me pasa casi siempre en el Furacu es que, mientras estoy comiendo me van apeteciendo beber los culetes de sidra, y casi siempre, justo cuando empiezo a pensar en lo bien que me iría uno, aparecen Nare o Yura y me lo echan.
 

Y ese es otro de los fuertes de El Furacu; su gente.
 
NARE es irremplazable, y lleva el tempo de la cocina y de la bebida como nadie. Yura, Ucraniano, es tan bueno echando sidra que a mi escanciador eléctrico en casa lo llamo “El Yura”. Apoteósico, que tio, que ritmo, que velocidad y que gran corazón…. Por El Furacu han pasado muy buena gente, y sin querer ser injusto puedo nombrar a Oscar, Cejudo, María, Andrei, y ahora "el nuevo" Nelson, un gran profesional, rápido, atento y que también echa la sidra muy bién.

Y como bien dice Nare, todo muy bien y todo muy bonito, pero sin Auro en la cocina no tenemos nada. No quiero saber los años que lleva al mando de los fogones de El Furacu pero veintitantos seguro que si, y eso que aun es una "jovencina" que no llega a los 50. Cocina Asturiana, cocina casera y la mano de la cocinera, la de toda la vida vamos. Todo tiene su explicación, verdad?
 
 
 
Las mesas de madera de siempre, los manteles y servilletas de papel, azul para ser más exactos. Y ahora viene lo importante; Y como es el comer?
Lo que más me gusta de El Furacu, es que acaba el año y me sigue apeteciendo repetir y repetir platos, casi todo está, no bueno, sino superior, pero evidentemente hay platos que destacan por encima de otros.
 

Las parrochas o los bocartes los preparan como nadie y suelen estar de escándalo.
 
 
Las gambas al ajillo excelentes, con ese aceite, ese ajo y ese picantillo tan característico, ahí se acaba normalmente la primera cesta de pan. Utiliza gamba completa, es decir, que la tienen que pelar y dejan lo que es la parte de la cola.
 

Los fritos de pixin son un manjar, no son baratos, pero es que los fritinos de pixín son un plato al que se le saca poco margen por el alto precio del rape (pixin) y por lo mucho que usas para cada buena ración, como las que ponen en El Furacu.
 
 
En temporada ponen tacos de bonito con salsa de tomate natural, de casa, sin triturar…. Que aunque sea un buen plato para tomar solo, se comparte muy bien, y está de chuparse los dedos. También ponen una ventresca de atún al horno buenísima.
 
Luego tienen platos de cuchara, dependiendo del día. Las patatinas con pulpo buenísimas, las patatinas con congrio de lujo, las patatinas con bonito de muerte, la fabada buena (a veces muy buena) y dicen los que lo comen, que el potaje, también es de otro mundo.
 
Si nos vamos a platos principales yo me quedo con la Raya, Dios mio como la guisan, con un poco de salsa con cebolla, pimenton rojo, y esas patatinas de casa mojadas en esa salsa….

 
Muy buenos los calamares en su tinta con patatas….
 
Los escalopines al cabrales son buenísimos, especialmente ese fina salsa de cabrales que tiene tan buen sabor y es tan poco empalagosa….
 
La ventresca de bonito al horno en temporada muy buena también, y si no tengo cuidado os cuento todos los platos de la carta.
 
En temporada tiene centollos de acá, angulas previo encargo y un largo etc.
Ahhhh, se me olvidaba; LOS CALLOS. Muy, muy, muy buenos callos con esas mismas patatinas fritas que antes comentaba….
 
No es la primera vez que mi avión aterriza en Asturias a las 11 de la noche, llamo a Nare y le pido que para las 12 me tenga preparada una ración de callos con patatinas, con una botella de sidra fresca, cuando vengo del extranjero es quizás lo que mejor me entra. Esas noches de invierno, cuando apetece algo casero y esa botellina de sidra, llamo a Nare y me “escondo” en El Furacu.
 
Y hay veces como la semana pasada, momentos en los que estoy saturado de comer fuera de casa, que me siento en la mesa del fondo a mano izquierda, MI MESA (aunque mi padre tenga más derecho que yo a ella), y que pido una ensalada completa que no me pregunteis como lo hace, pero que también es buenísima, finísima y maravillosa….
 
 
Cuando vayais a El Furacu, no os olvidéis de mirar a la mesa del fondo a la izquierda, porque aunque aun no tenga ni mi nombre (ni el de mi padre) ni el de mi familia escrito, muy probablemente esté uno de nosotros disfrutando de esos manjares, que en ningún sitio del mundo, los tratan y los ponen como en El Furacu.

Y para aquellos preocupados por su salud económica viene la mejor parte del post. No solo se come bien, sino que se come barato. Dependiendo del drinking, hay veces que salimos a 17/18 euros y las que más a 30 (obviamente, si entramos en centollos y angulas ya hablamos de otros precios).
 
Si pasais por Villaviciosa, no dejéis de ir al FURACU y preguntar por Naredo. Vais de parte de los dueños de la mesa del fondo a la izquierda…. ;)
Abrazo viajeros….
 
No dejéis de seguirme en Twitter  @viajerosecreto

2 comentarios:

  1. Tendremos que pasar por allí a probar algo. jeje

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  2. todo estaba buenisimo cuando fui...y la gente es maravillosa...creo que jámás me lo he pasado tan bien!

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