Marruecos....
Otra gran desconocida para el turista Español. No se por qué, quizás es porque está tan cerca, pero tan lejos. No creo confundirme con esta afirmación, está basada en mi experiencia y lo que he vivido en Casablanca y Marrakech. Si que hay españoles; trabajando, de turistas, etc. pero el número no es directamente proporcional a la cercanía de los dos países.
Es verdad que compartimos estrecho, pero estamos tan lejos el uno del otro, culturalmente, gastronómicamente y un largo etc.
Mi primera visita a Marrakech fue hace 8 años, y fue divertido, una despedida de soltero para 14 amigos, la verdad, no se por qué se me ocurrió organizarla en Marrakech. Bueno, si, por la diferencia, una hora y media de vuelo y dos mundos opuestos, o al menos, totalmente distintos.
El trabajo me lleva a Marrakech y es una buena noticia, no me volvió loco pero creo que tiene potencial.
Me atrae la idea de hospedarme a las afueras de la ciudad, en uno de los resorts de lujo que hay en la zona de la Palmeraie, ahí te puedes relajar, descansar, desconectar, tomar el sol, jugar al golf y pasar largas horas en la piscina leyendo y disfrutando de la tranquilidad del lugar. Una o dos veces al día, si apetece, nos escaparíamos al Zoco de Marrakech, a la Plaza de Djemaa El Fna, al Kasbah o simplemente de compras por el centro moderno. Son muchas las opciones para disfrutar de todo un poco.
Otra de las opciones, y es la que ahora os voy a contar, es la de pasar unas cuantas noches en un Riad. La palabra "Riad" significa Jardines y se trata de una construcción tradicional que en los últimos años han visto un boom en el sector turístico, reformando estas preciosas casas antiguas y convirtiéndolas en pequeños hoteles, quizás cercanos al concepto "Boutique Hotels" tan de moda en el mundo.
Los Riads siempre se encuentran dentro de los muros de la Medina, por lo que las instalaciones suelen estar limitadas en espacio, aunque como podremos ver, siempre nos encontramos con gratas sorpresas.
Antes de mi viaje a Marrakech hice un pequeño research y me encontré con este precioso Riad; Villa Makassar es uno de los TOP en Tripadvisor, y eso suele siempre ser por algo....
Es muy difícil moverse por dentro de la Medina, muchas callejuelas, muchos recovecos y la verdad, echamos hora y media para llegar al mismo, claro que llevábamos coche. Recomiendo parar un Petit Taxi en la calle y que te lleve directamente, ahorro de tiempo y de dinero. No se por qué a los hombres nos cuesta pedir direcciones o preguntar, tampoco es tan difícil verdad?
Llegar a Villa Makassar es muy fácil, ahora que lo conocemos, pero básicamente hay que usar como referencia una de las entradas a la Medina, en este caso la puerta de BAB AGNAOU....
Después de caminar durante unos 5 minutos por unas calles que, parecía que escondían de todo menos un precioso Riad, llegamos a las puertas del mismo. Y que quereis que os diga, después de caminar por una calle como esta...
Y encontrarte con una puerta como esta....
Te preguntas si no hubiera sido mejor haber escogido una de las Grandes Cadenas que tienen su hotel en Marrakech...
Picamos en la puerta y segundos después tenemos la respuesta en forma de bienvenida... la entrada del Riad es simplemente espectacular. Es en ese mismo momento cuando uno se da cuenta de lo acertada de una decisión...
Entramos en otro mundo, nos alejamos del ruido, se cierra la puerta de la calle y se abre la del cielo, parece mentira que detrás de esos muros se esconda todo esto.
Inmediatamente nos llevan a un salón para los huéspedes, donde nos sirven un café, un agua, unas pastas y nos hacen el check inn.
Seguidamente nos dan un pequeño tour por el hotel.
Se trata de una gran casa, espaciosa, abierta, y con 12 habitaciones de distintos tamaños. Todas ellas abiertas a dos patios centrales. El agua siempre presente y el verde también.
El hotel cuenta con un precioso SPA, piscina, chorros, masajes y un largo etc. No, no es el más grande del mundo, pero tampoco lo esperábamos.
El pasillo al mismo nos hace pensar qué puede haber detrás....
Y nuestros mejores augurios se cumplen cuando contemplamos este precioso, tranquilo y relajante SPA.
Después nos llevan a la azotea, donde hay varias hamacas y un Bar que se encuentra cerrado en invierno, las vistas, el sol, la paz.... es una delicia....
El Riad también dispone de una pequeña piscina, perfecta para refrescarse, aunque ahora es invierno (Diciembre) y la temperatura del agua no acompaña...
Más patios interiores, más zonas de relax, más verde.... Precioso..!!
Tanto de día como de noche, el Riad no tiene desperdicio ninguno...
Después de ver las zonas comunes, sala de fumadores y un largo etc. nos llevan a nuestras habitaciones, que tampoco nos defraudan...
La mia es pequeña pero cómoda... Teniendo en cuenta que pasé varias horas trabajando en la mesa, no es lo mejor del mundo para un viaje de negocios, pero, quien va a Marrakech a trabajar? De todas formas compensa...
La habitación de mi compañero estaba mucho mejor, y ahí, si que se podía trabajar mucho mejor...
El Hotel también dispone de un buen restaurante donde se cocinan paltos locales y alguno internacional. No tuvimos tiempo para cenar pero está muy claro que para una cena de negocios y tranquila, el lugar es de lo más acogedor
Después de unas horas de trabajo y de ordenador, nos vamos al famoso Zoco de Marrakech y disfrutamos mucho con otra cultura, con otro mundo y con el laberinto de calles que esta preciosa ciudad Africana nos ofrece.
Un bello atardecer, una cerveza helada y una cena local....
Se puede pedir más...?
Nada mejor que un buen Riad, en este caso Villa Makassar, para descansar y recargar las pilas, mañana nos queda un día muy largo con 10 horas de coche por las montañas del Atlas.... pero esa es ya, otra historia que bien se merece otro post...
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